ENCARGADO DE UNA NOCHE DE PLACER: DANIEL MELERO

Reseña del show de Melero en Villa María, por Iván Oryinicz Tarres.

Hay tantas formas de disfrutar un show como personas sobre la tierra, pero sin dudas todos coincidimos en que hay artistas que nos proponen un hito en cada presentación y Daniel Melero es uno de ellos.

El pasado Sábado 23, en Villa María el ex líder de Los Encargados llegó por primera vez con su banda para concretar una noche de esas que dejan un eco por días en las almas que asistieron. El lugar era Escena, el Line Up prometía una fiesta hacía semanas, las expectativas estaban todas puestas en esa noche donde se presentarían Avto, Fer Mercadal y Daniel Melero, con Black Perez (Gestor de la fecha) y Francisco Ludueña a cargo de los potes antes y después de los músicos.

Las puertas abrieron a las 23:00Hs y desde entonces se transitaron emocionalidades de esas que ocurren sólo en recitales íntimos y exclusivos, cuando el artista que está por presentarse es mentor de generaciones enteras de músicos que construyeron y destruyeron paradigmas dentro de nuestro Rock /Pop nacional. Pero, además de eso, fue una noche que a Villa María le hacía falta hace tiempo, un show que ocurre con el artista cuerpo a cuerpo con el público, tocando sin estar sujeto siquiera a una lista de temas, generando y encontrando sensaciones del otro lado todo el tiempo.

Primero Avto presentó su tercer disco “Film”, editado por el sello “El Libertador” y más tarde tocó con Daniel Melero como guitarrista en su banda. Guille y su guitarra nos hicieron un recorrido por sus canciones, las que con simpleza y una personalidad muy sólida, fueron un prólogo perfecto para lo que estaba comenzando y seguiría por el resto de la noche.
Después de un rato y con la gente más cerca del escenario, fue el turno de Fer Mercadal, quien presentó “Música del espacio” llenando de armonía la sala, el sonido se ponía cada vez mas tecno, preparando la tierra para que, a continuación, salieran a escena Melero y su banda para brindar un show impecable, cargado de esencia pura, escénica y musicalmente.

Cuando por fin se hizo la hora, en el escenario estaban los músicos, Daniel y un vaso de whisky, que sería su aliado hasta el final del show. Lo que ocurrió después es difícil ponerlo en palabras. Durante la entrevista que hicimos previa al show hablamos mucho con Daniel sobre lo que ocurre con la banda sobre el escenario y mucho de eso fue lo que pasó. Siete músicos comunicándose al máximo y un Melero solo siendo. Los temas fluían uno detrás de otro con muchísima agilidad, haciendo sentir el temor de que todo se termine rápido. Melero recorrió su repertorio hablando muy poco entre tema y tema, pero con una gestualidad corporal de apertura constante respecto a las primeras filas del público, que vivieron el show dentro del escenario. Poco después de una hora el show llegó a su fin y para entonces ya habían sonado temas como “La Sed”, “Sangre en el volcán”, “Amor difícil”, “Tratame suavemente” -presentado por él como “Un clásico” entre risas- y otras canciones como “Disfrutar” de su nuevo trabajo editado este año y varios temas más que consiguieron demostrar la vigencia del artista y despertaron interés por el presente de su banda.

Foto de video de Ulises Rodríguez Pomba.