Tres shows en simultáneo hicieron del sábado por la noche algo especial, music everywhere!

No todos los sábados son iguales, así como todos los recitales tampoco lo son. En el sábado que pasó, tres shows se llevaron a cabo casi en simultáneo en Villa María, y los tres demostraron estar a la altura de las circunstancias.

Nonabonda presentó su disco «Confusión» en el Centro Cultural Comunitario Leonardo Favio, frente a una buena cantidad de público. En un gran escenario volvió a desplegar sus melodías con un estilo muy particular, con el que ha logrado construir su propio identidad sonora. Antes tocó la banda «Cancionero«, re-versionando clásicos de grandes cantautores argentinos.

En otro de los lugares donde cada día se hace más fuerte la escena musical independiente de la ciudad, Polaroid House, una gran banda de La Plata se presentaba por primera vez frente al publico villamariense. Estamos hablando de Tototomás, una banda de esas que te hacen amar el verano aunque lo odies, que te hacen sonreir mientras los escuchas, que, aunque numerosa en cantidad de músicos (ocho integrantes), expresan su música con una simpleza que los hace únicos.

Hijos del increíble y revolucionario semillero de bandas de la ciudad de La Plata, Tototomás cuenta con un gran contenido vocal, con coros pegadizos llevados a cabo por el gran caudal de voz de Tomás Agustín Casado, cantante principal, acompañado por Evangelina Viscoitaliano la voz femenina que le otorga al grupo todo un gran porcentaje de su identidad musical. Banjo, guitarra criolla, distorsión, trompetas, sonidos electrónicos, coros de cancha, fiesta, todo eso junto y resuelto de manera simple y directa es Tototomás.

Antes de la banda platense, tocó la local «La Parsifónica«, comandado por Tefi Parsi y su vibráfono, la columna vertebral de sus canciones. Al rededor de los sonidos oníricos que nacen del instrumento de Tefi, se encuentra una banda de grandes músicos que acompañan y suman a la ensoñación con sus instrumentos pocos convencionales.

Flauta, clarinete, chelo, bajo y guitarra eléctrica son los que, además del vibráfono, hacen del recital, una experiencia surrealista.

En el mismo momento que los dos eventos anteriores, pero en el Salón Dorado, una super fiesta funk poco a poco iba tomando vuelo. Lattenzia, Los Funky Dealers y una enorme cantidad de gente detrás.

Federico Lattanzi hace un tiempo decidió dejar los recitales solistas de lado, llamar a su banda y amigos, y organizar una fiesta enorme, la cual dura hasta hoy, y no se sabe cuanto terminará. Si es que tiene un fin.

A la primer fiesta, le siguió otra, y otras, con una gira por diferentes ciudades llegando hasta Buenos Aires, pasando por Carlos Paz, Córdoba, Bell Ville, entre otras. Llevando consigo no sólo músicos sino cualquier interesado en sumarse al tour.

Así llegamos a la noche en cuestón, una fiesta organizada de principio a fin, desde los afiches hasta las entradas, con la colaboración de una cantidad enorme de personas. La gente de la Feria SuperLógico, pizzas gratis de «el campeón de la pizza«, Sebastián Perotti con las visuales, remeras de «Los Funky Dealers» por todos lados, Gastón Perez musicalizando, cada uno desde su rol hicieron que el evento sea algo más que música en vivo.

Fer Mercadal, De Frente al Piso, Mentales cebras, Radical Roots, Koko MC y Lattenzia & The Funky Dealers Orchestra fueron los encargados de hacer bailar al numeroso público presente. El salón Dorado se llenó hasta el patio, seis horas de fiesta y música en vivo, y la gente se quedó hasta el final.

Algo verdaderamente grande se está gestando detrás de estas Super Fiestas Funky Dealers, las cuales ya no parecen tener fin, y ojalá que así sea.