«HACER UN SHOW SINFÓNICO ERA UN SUEÑO Y AHORA ES UNA REALIDAD»
Hablamos con el Trío Mal de Amores antes de su gran función N° 100 junto a la Orquesta Filarmónica de Villa María.
El próximo jueves 19 de diciembre, el emblemático Teatro Verdi de Villa María será el escenario de un evento histórico: el Trío Mal de Amores celebrará su función número 100 con un espectáculo único que reunirá teatro, música y una imponente puesta sinfónica junto a la Orquesta Filarmónica de Villa María.
Este hito representa mucho más que un número redondo para el grupo teatral. Es el reflejo de años de esfuerzo, creatividad y la firme convicción de acercar al público un arte genuino, profesional y profundamente local. Para esta ocasión especial, el trío asumió el desafío de reinventar su obra, incorporando la riqueza instrumental de 25 músicos que sumarán nuevas dimensiones emocionales y estéticas a su ya aclamada propuesta artística.
Realizar esta función en el Teatro Verdi, uno de los espacios más icónicos de la ciudad, no solo destaca la magnitud de la celebración, sino también la apuesta del Trío Mal de Amores por el arte independiente y la escena local.
Con una puesta que promete conmover y sorprender, esta celebración no solo marcará un antes y un después en la trayectoria del trío, sino que reafirma el compromiso con el arte y la cultura de Villa María.
Las entradas están disponibles en la boletería del Teatro Verdi, en su sitio web o a través de las redes sociales del grupo. Una noche imperdible para quienes quieran ser parte de esta experiencia única que quedará grabada en la memoria cultural de la ciudad.
Hablamos con el Trío para saber todo lo que están armando para su gran noche.
¿Qué significa para ustedes haber llegado a la función número 100?
Significa una alegría y un orgullo enorme por todo lo que implica hacer teatro independiente, sumado a que somos un grupo numeroso, lo que suma muchísimo a la calidad del espectáculo, pero también a ciertas complejidades de logística.
Fue y es un objetivo del grupo, nos planteamos que a nuestra obra la vea todo el mundo y hacemos lo que podemos para que eso suceda, requiere de un trabajo enorme de producción y gestión y obviamente de una hermosa aceptación del público que es lo que nos motiva.
¿Cómo surgió la idea de realizar esta función tan especial en el Teatro Verdi?
En principio, como todo lo que hacemos o intentamos hacer, surge de una necesidad y un deseo artístico. La idea de hacer un “Trío Sinfónico”, de orquestar nuestra obra, es un deseo que tenemos desde hace un tiempo, contamos en nuestra ciudad con una orquesta excepcional como es la Orquesta Filarmónica de Villa María y a nosotros soñar no nos cuesta nada (por ahora jeje), sin embargo entendíamos que no era más que eso: un sueño de los tantos que tenemos, ya que siempre supimos que se trataba de una apuesta muy grande (en un contexto donde todo tiende a reducirse para achicar costos, nosotros sumamos 25 músicos). Cuando nos dimos cuenta de que se acercaba la función número 100 supimos que era la excusa perfecta (para nosotros).
Si hay algo que caracteriza a este grupo es la capacidad de reinventarse. Logramos un espectáculo que sintetiza nuestros deseos artísticos, estéticos, emocionales y políticos; se trata de una obra muy honesta para nosotros, y es por eso que queremos que la vea todo el mundo. No hicimos una obra para hacer todo lo que estamos haciendo, hicimos una obra en la que confiamos mucho y la ponemos a disposición, le buscamos la vuelta para que la vea la mayor cantidad de gente posible, es así como surgió el ciclo de artistas invitados/as o el proyecto maravilloso del Teatro es Útil que nos permitió llevar a 5 escuelas rurales un millón de útiles escolares entre muchas cosas más.
Es por todo eso que siempre los objetivos son varios: acrecentar nuestro público, compartir y aportar nuestro humilde y pequeñísimo aporte a la Filarmónica que hoy es un grupo independiente, celebrar nuestra corta pero basta trayectoria y, principalmente, reivindicar el arte local, acercarle al público una experiencia artística extremadamente profesional, de mucha calidad y netamente local.
¿Qué representa para ustedes presentarse en un escenario tan emblemático y de mayor capacidad como el Verdi?
Un desafío enorme en todo sentido, pero dijimos “Función número 100 con la Orquesta Filarmónica ¿Dónde va a ser? En el Teatro Verdi.
Es una sensación hermosa, representa un gran logro obtenido, una de las figuritas doradas del álbum.
¿Cómo describirían el desafío artístico y técnico de trabajar en un espacio más grande del habitual?Bueno, es repensar la obra absolutamente. La puesta en escena de nuestra obra es más bien “‘íntima”, es por eso que el Teatro del Club Sarmiento le sienta tan bien y nos gusta tanto (más allá de que en esa sala hicimos el estreno y, por ende, la terminamos de pensar ahí), poner la obra en el Verdi implica otro grado de espectacularidad, el escenario es mucho más grande, pero el espacio escénico no tanto, ya que estamos sumando una orquesta de 25 músicos, también los recursos técnicos son mayores. El desafío ahora es pensar en lo macro sin perder los detalles, la idea es poder separar escénicamente los momentos puramente teatrales de los musicales potenciándolos con la iluminación.
¿Cómo fue el proceso de integrar música en vivo con el formato teatral del Trío Mal de Amores?
Fue la primera certeza que tuvimos junto a la temática. Nos juntamos a hacer música y desde ahí surgió la necesidad y el deseo de hacer algo desde lo teatral, pero siempre supimos que iban a ser tres personajes que cantan y sufren por amor (casualmente estábamos los tres de esa manera jeje).
Fue un proceso muy interesante y divertido, investigamos mucho sobre el desamor y escuchamos mucha música, entonces nos encontramos con el bolero como género, que representa el discurso de la ruptura amorosa por antonomasia y nos encantó. Eso nos permitió pensar la estética, los personajes y el tipo de humor. El proceso cada vez era más ambicioso y tomamos la acertadísima decisión de sumar la banda.
¿Qué pueden adelantar sobre la dinámica entre el trío y la orquesta durante el espectáculo?
Lo que podemos decir es que suena de una manera impresionante. Nosotros contamos con cinco músicos increíbles, la calidad musical del espectáculo siempre fue una garantía (ellos siguen estando en el espectáculo, la orquesta se suma), pero al orquestarse, al agregar tantos instrumentos diferentes, cobra otro color y otro sentido, es muy impresionante y emocionante.
¿Cómo ven la evolución del Trío Mal de Amores desde su primera presentación hasta esta función número 100?
La vemos de una manera muy hermosa y muy amorosa. La verdad es que sentimos que el proyecto creció muchísimo y muy hermosamente desde todos los ámbitos. La función creció muchísimo, el grupo humano creció muchísimo (no solo los vínculos, sino también el número, se ha sumado gente muy hermosa), el público creció muchísimo (y el amor que nos brindan), el grupo de producción creció muchísimo. Realmente el “Movimiento Trío Mal de Amores” crece todo el tiempo y a nosotros nos hace muy felices.
¿Qué aprendizaje o momento destacarían como el más significativo en su trayectoria?
La realidad es que cada momento del proceso que venimos realizando es de puro aprendizaje y muy significativo. Creo que un click importante es el momento en que nos damos cuenta que ya no somos solo un grupo que hace teatro y música, sino que somos un grupo que produce y gestiona (y de manera independiente), es de lo que más trabajamos y lo que más esfuerzo y tiempo nos lleva (que es lo único que tenemos para invertir junto a las ideas, obviamente). Sin embargo, no hay dudas que el momento más significativo siempre es el de la función, cuando termina y nosotros recibimos la devolución del público, ahí es cuando todo vale la pena.
¿Qué impacto esperan que tenga esta función en el público y en su propio recorrido artístico?
El mismo de siempre: el disfrute y la emocionalidad que generan pensamiento.
¿Qué significa para ustedes, como artistas locales, realizar un evento de esta magnitud en Villa María?Un orgullo muy grande y un desafío enorme. Como mencionaba anteriormente, uno de los principales objetivos es reivindicar la escena local, realizar un espectáculo muy profesional y de alta calidad absolutamente made in Villa María.
Por otro lado, es nuestro trabajo, a lo que nos dedicamos, para lo que nos formamos continuamente, es lo que sabemos y nos gusta hacer. Lo que significa es eso también: muchísimo trabajo y dedicación.
¿Cuál es su mensaje para quienes los han acompañado en estas 100 funciones y para el público que asistirá al Teatro Verdi?
Para el público que nos acompañó siempre, el mensaje es de agradecimiento total. Estamos muy agradecidos, la verdad es que es increíble el amor que recibimos, nos hace muy bien.
Y para el público que asistirá al Verdi, el mensaje también es de agradecimiento, por confiar y por aportar al arte independiente. También deseamos que sea una experiencia muy hermosa para ellos.
Después de este hito, ¿qué sueños o proyectos tienen para el futuro del trío?
Como dije antes, nosotros queremos que la obra la vea todo el mundo. Trabajamos para eso.
También puedo decir que el próximo objetivo es hacer “El Teatro es Útil 2”, ya estamos trabajando en eso.
¿Cómo se consiguen las entradas?
En la boletería del Teatro Verdi (HIpólito Yrigoyen 329, en la web del Teatro Verdi (www.teatroverdivm.com.ar), por WhatsApp o llamando al Teatro Verdi (3534232178) o comunicándose con nosotros vía Instagram: @triomaldeamores